Finca Los Caleros nació como un proyecto con alma.
Durante años soñé con crear un lugar donde las personas pudieran desconectar del ruido, reconectar con la naturaleza y vivir momentos auténticos con los suyos.
Construà con mimo esta finca, cuidando cada rincón, cada detalle, para conservar su esencia rústica sin renunciar al confort. Lo que comenzó siendo mi refugio personal, hoy lo comparto con quienes buscan una experiencia rural distinta, sincera y llena de calma.
Me encanta recibir a mis huéspedes con los brazos abiertos, ayudarles a descubrir la zona y hacer que se sientan como en casa (o incluso mejor).
Si buscas un sitio especial donde celebrar la vida, te espero en Finca Los Caleros.